La Virgen Madre

Las Homilías en alabanza de la Virgen Madre (De laudibus Virginis Matris), comúnmente conocidas como La Virgen Madre, es una obra fundamental de San Bernardo de Claraval que se centra en la interpretación del pasaje evangélico de la Anunciación (Lucas 1:26-38). A través de cuatro homilías, Bernardo desarrolla una profunda reflexión teológica y espiritual sobre el papel de María en el plan divino de salvación, explorando especialmente el misterio de su maternidad virginal y su papel como mediadora entre Dios y los hombres. El texto destaca por su estilo poético y contemplativo, característico de la espiritualidad cisterciense.

En estas homilías, Bernardo presenta a María como el modelo perfecto de humildad y obediencia a la voluntad divina, enfatizando cómo su "fiat" (hágase) fue crucial para la realización de la Encarnación. El autor desarrolla también el tema de la virginidad perpetua de María, no solo como un hecho biológico sino como un signo de su consagración total a Dios, y establece las bases de lo que posteriormente se conocería como la doctrina de la mediación mariana. La obra es fundamental para comprender tanto la mariología medieval como la espiritualidad afectiva característica de San Bernardo, donde la devoción mariana se integra perfectamente con la contemplación de Cristo.